Pale blue eyes

El sexo como pretexto válido para romper con la monotonía; el sexo-motor; el sexo-ansiedad; la costumbre del sexo, como un hartazgo cualquiera que se volverá lastre; el sexo colosal, incontenible, frenético, ambiguo como un juego que confunde y luego aclara y vuelve a confundir; el sexo-simulacro, el sexo-obviedad. El placer, al fin, un encomio que vaya justo en sentido inverso a lo que se vive.

Casi nunca.
Daniel Sada.

Empezamos una nueva novela.

¿Qué caerá primero, mi cabeza o este cometa? (Por el gusto de citar poemas que me gustan)

(aullido)

(aullido)

Aspiro el aroma penetrante de la vida en muerte.

Apesta -como a cien mofetas- y me sacude -como un toro-.

 Sigue apestando mi cabeza sigue apestando.

Caerá primero mi cabeza caerá primero.
(aullido)

(aullido)


 Poema de: Oz Dramnor

Crónica visual que mira hacia el norte.(2)

Nosotros (con "nosotros" me refiero a la gente normal y a la que no lo somos tanto), todos somos seres imperfectos que vivimos en un mundo imperfecto. Y no deberíamos de vivir de una manera tan rígida, midiendo la longitud con una regla y los ángulos con un transportador como si la vida fuese un depósito bancario. ¿No te parece? Reiko.