Solamente necesito el tiempo que dura una canción para enrollarme en un paracaídas cual niño héroe y tirarme de un edificio alto (como del noveno piso) de preferencia ubicado en Nueva York.
Me veo parada ahí en la mera esquinita, con el cabello todo canoso y con muchas arrugas en la cara, imagino que seré una señora que viste con muchos colores llamativos y que recoge su cabello con un prendedor lleno de figuritas.
Lo que no faltaría en la despensa de mi pequeño pero acogedor departamento solitario y adjetivosamente desordenado serían los limones, té y miel, mucha miel.
Sólo necesito tres minutos con nueve segundos para ver lo que yo quiero ver del mundo, el tiempo exacto en el que sería un juguete de plástico.
1 comentario:
MUY buena canción Pau... :)
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